29 de enero de 2014

Domine, quo vadis?


Luigi Garzi

El resultado de mis predicaciones no había sido pasado por alto por el emperador, no era difícil saber que en los próximos días sería prendido, acusado de idolatría y ejecutado. Recogí mis pocas pertenencias y me dispuse a abandonar la ciudad al alba, para no alterar el orden público. Tras un largo trecho de la Vía Apia vislumbré un fulgor en la distancia... al aproximarme reconocí su figura, cargaba una cruz.

Ya sabía el porqué de su presencia, con cierta resignación y asumiendo mi tarea pregunté:

- Adónde vas, Señor?

Él contestó:

- A Roma, a ser crucificado de nuevo.


27 de enero de 2014

Soneto X

¡Oh dulces prendas, por mi mal halladas,
dulces y alegres, cuando Dios quería!
Juntas estáis en la memoria mía,
y con ella en mi muerte conjuradas.

¿Quién me dijera, cuando en las pasadas
horas en tanto bien por vos me guía,
que me habíais de ser en algún día
con tan grave dolor representadas?

Pues en una hora junto me llevastes
todo el bien que por términos me distes,
llevadme junto el mal que me dejastes.

Si no, sospecharé que me pusistes
en tantos bienes, porque deseastes
verme morir entre memorias tristes.


Garcilaso de la Vega

26 de enero de 2014

Bird of Sorrow


Even if a day feels too long, if you feel like you can't wait another one
And you're slowly giving up on everything, love is gonna find you again.
Love is gonna find you, you better be ready then.

You've been kneeling in the dark for far too long.
You've been waiting for that spark, but it hasn't come.
Well I'm calling to you please, get off the floor
A good heart will find you again.
A good heart will find you, just be ready then.

Tethered to a bird of sorrow, a voice that's buried in the hollow
You've given over to self-deceiving, you're prostrate bowed, but not believing
You've squandered more than you can borrow
You've bet your joy on all tomorrows, for the hope of some returning'
While everything around you is burning.

Come on, we gotta get out, get out of this mess we made
And still for all our talk, we're both so afraid.
Will we leave this up to chance like we do everything?
Love is gonna find us again
Love is gonna find us, we've got to be ready then.

Tethered to a bird of sorrow, a voice that's buried in the hollow
You've given over to self-deceiving, you're prostrate bowed, but not believing
You've squandered more than you could borrow
And you bet your joys on all tomorrows, for the hope of some returning
While everything around you's burning.
Well I'm not leaving you here, I'm not leaving you here. I'm not leaving.

I'm hanging on
Hanging on, with the faithful.

Glen Hansard

22 de enero de 2014

La familia de Carlos IV


Francisco de Goya


21 de enero de 2014

Rima XLII

Cuando me lo contaron sentí el frío
de una hoja de acero en las entrañas;
me apoyé contra el muro, y un instante
la conciencia perdí de donde estaba.

Cayó sobre mi espíritu la noche;
en ira y en piedad se anegó el alma…
¡Y entonces comprendí por qué se llora,
y entonces comprendí por qué se mata!

Pasó la nube de dolor… Con pena
logré balbucear breves palabras…
¿Quién me dio la noticia?... Un fiel amigo…
¡Me hacía un gran favor!... Le di las gracias.

Gustavo Adolfo Bécquer

20 de enero de 2014

Un pequeño pájaro que canta


Tardaste en encontrarlo
Y no quisiste huir

Me quedaré con algo
Me acordaré de ti

Y de un pequeño pájaro que canta
Una rama seca sobre tu colchón
Una sombra rápida que avanza
Hacia mi rincón

No hay esperanza
No hay esperanza

Trataste de evitarlo
Cortaste la raíz

Y de un pedazo amargo
Lograste ser feliz

Un pequeño pájaro que canta
Una rama seca sobre tu colchón
Una sombra rápida que avanza
Hacia mi rincón

No hay esperanza
No hay esperanza


Fabián

18 de enero de 2014

El caballero del reloj


Tiziano Vecellio

17 de enero de 2014

A una iglesia

Cuanto han visto tus muros,
cuanto han visto tus vidrieras
con el paso de los años,
vidas, siglos y eras.

Reyes, caballeros y peregrinos
pasaron inquietos por ellas
y sólo con tu silencio calmaste
su alma, ahora serena.

Hay quien pasa por tu lado
y únicamente ve piedra,
algunos vemos historia,
arte, fe y belleza.

16 de enero de 2014

La canción más hermosa del mundo


Yo tenía un botón sin ojal, un gusano de seda,
medio par de zapatos de clown y un alma en almoneda,
una hispano olivetti con caries, un tren con retraso,
un carné del Atleti, una cara de culo de vaso,

un colegio de pago, un compás, una mesa camilla,
una nuez, o bocado de Adán, menos una costilla,
una bici diabética, un cúmulo, un cirro, una strato,
un camello del rey Baltasar, una gata sin gato,

mi Annie Hall, mi Gioconda, mi Wendy, las damas primero,
mi Cantinflas, mi Bola de Nieve, mis tres Mosqueteros,
mi Tintín, mi yo-yo, mi azulete, mi siete de copas,
el zaguán donde te desnudé sin quitarte la ropa.

Mi escondite, mi clave de sol, mi reloj de pulsera,
una lámpara de Alí Babá dentro de una chistera,
no sabía que la primavera duraba un segundo,
yo quería escribir la canción más hermosa del mundo.

Les presento a mi abuelo bastardo, a mi esposa soltera,
al padrino que me apadrinó en la legión extranjera,
a mi hermano gemelo, patrón de la merca ambulante,
a Simbad el marino que tuvo un sobrino cantante,

al putón de mi prima Carlota y su perro salchicha,
a mi chupa de cota de mallas contra la desdicha,
mariposas que cazan en sueños los niños con granos
cuando sueñan que abrazan a Venus de Milo sin manos.

Me libré de los tontos por ciento, del cuento del bisnes,
dando clases en una academia de cantos de cisne,
con Simón de Cirene hice un tour por el monte Calvario,
¿qué harías tú si Adelita se fuera con un comisario?

Frente al cabo de poca esperanza arrié mi bandera,
si me pierdo de vista esperadme en la lista de espera,
heredé una botella de ron de un clochard moribundo,
olvidé la lección a la vuelta de un coma profundo.

Nunca pude cantar de un tirón
la canción de las babas del mar, del relámpago en vena,
de las lágrimas para llorar cuando valga la pena,
de la página encinta en el vientre de un bloc trotamundos,
de la gota de tinta en el himno de los iracundos.

Yo quería escribir la canción más hermosa del mundo.

Joaquín Sabina

14 de enero de 2014

13 de enero de 2014

Ideario

Me da vértigo el punto muerto
y la marcha atrás,
vivir en los atascos,
los frenos automáticos y el olor a gasoil.
Me angustia el cruce de miradas
la doble dirección de las palabras
y el obsceno guiñar de los semáforos.
Me da pena la vida, los cambios de sentido,
las señales de stop y los pasos perdidos.
Me agobian las medianas,
las frases que están hechas,
los que nunca saludan y los malos profetas.
Me fatigan los dioses bajados del Olimpo
a conquistar la Tierra
y los necios de espíritu.
Me entristecen quienes me venden clines
en los pasos de cebra,
los que enferman de cáncer
y los que sólo son simples marionetas.

Me aplasta la hermosura
de los cuerpos perfectos,
las sirenas que ululan en las noches de fiesta,
los códigos de barras,
el baile de etiquetas.
Me arruinan las prisas y las faltas de estilo,
el paso obligatorio, las tardes de domingo
y hasta la línea recta.
Me enervan los que no tienen dudas
y aquellos que se aferran
a sus ideales sobre los de cualquiera.
Me cansa tanto tráfico
y tanto sinsentido,
parado frente al mar mientras que el mundo gira.

Francisco M. Ortega Palomares

12 de enero de 2014

Standby


Vive mirando una estrella
siempre en estado de espera.
Bebe a la noche ginebra
para encontrarse con ella.
Sueña con su calavera
y viene un perro y se la lleva,
y aleja las pesadillas
dejando en un agujero
unas flores amarillas
pa' acordarse de su pelo.

Sueña que sueña con ella
y si en el infierno le espera...
Quiero fundirme en tu fuego
como si fuese de cera.

Antes de hacer la maleta
y pasar la vida entre andenes,
deja entrar a los ratones
para tener quien le espere.

Sueña con su melena
y viene el viento y se la lleva,
y desde entonces su cabeza
sólo quiere alzar el vuelo,
y bebe rubia la cerveza
pa' acordarse de su pelo.

Sueña que sueña la estrella
siempre en estado de espera;
vuelve a coger la botella
y pasa las noches en vela,

...siempre en estado de espera.


Extremoduro

9 de enero de 2014

San Pedro cura a los enfermos con su sombra


Tommaso Masaccio

Y los que creían en el Señor aumentaban más, gran número así de hombres como de mujeres; tanto que sacaban los enfermos a las calles, y los ponían en camas y lechos, para que al pasar Pedro, a lo menos su sombra cayese sobre alguno de ellos. Y aun de las ciudades vecinas muchos venían a Jerusalén, trayendo enfermos y atormentados de espíritus inmundos; y todos eran sanados.

Hechos 5, 14-16

8 de enero de 2014

El campanario

Las golondrinas llegaron al campanario también esa primavera, ajenas a todo comenzaron con sus vuelos, sus nidos, sus vidas de pájaros. La gente seguía su ruta bajo sus alas, pero algo había cambiado en aquel pueblo; las golondrinas echaban de menos a la gente pequeña, nadie corría, nadie jugaba, nadie alborotaba el silencio. Dispuestas a resolver ese enigma se dividieron en bandadas e investigaron a fondo el pueblo y sus alrededores.

Tan sólo encontraron un edicto que rezaba: "Prohibidos los flautistas".


7 de enero de 2014

Eres


No das respuestas
ni luz a mi jardín,
y no hay guerrero
que descanse en ti.
No hay luna de agosto,
ni lluvia de abril,
que no haya dormido
antes en ti.

Eres pequeña
como una estrella fugaz,
como el universo
antes de estallar.
Vuelas como la risa,
como el diente de león.
Si yo te miento,
tú lo haces mejor.

Ahora dime qué te han de ofrecer
las tardes perdidas, tu sangre en mi piel,
la casa cansada, la manta en el sofá,
la tele encendida, las ganas de llorar.
Y ahora dime qué te van a dar
la paz en tu vientre, el fondo del mar,
gaviotas cansadas, mi sombra en el sofá,
la brasa encendida, las ganas de matar.

Eres la copa rota,
el mar en que me adentro,
viento que susurra,
el tálamo desecho,
ácido en mis ojos,
el café de mis mañanas,
la mano en el sexo,
el rumor de batalla.

No das respuestas
ni luz a mi jardín,
y no hay guerrero
que descanse en ti.
No hay luna de agosto,
ni lluvia de abril,
que no haya dormido
antes en ti.

Ismael Serrano

5 de enero de 2014

4 de enero de 2014

Dioses y Héroes de la Antigua Grecia (Capítulo XVI - Teseo)

Unos años después, las amazonas, una fiera raza de mujeres guerreras de Asia, invadieron Grecia y atacaron Atenas. Gracias a los consejos de la diosa Atenea, Teseo consiguió derrotarlas; pero, desde entonces, alardeó siempre de su coraje.

Un día, su amigo Pirítoo le dijo:
-Estoy enamorado de una hermosa mujer. ¿Me ayudarás a casarme con ella?
-Por supuesto -contestó Teseo-. ¿No soy el rey más valiente que existe? ¡Mira lo que les hice a las amazonas! ¡Mira lo que le hice a Minotauro! ¿Quién es esa mujer?
-Perséfone, la hija de Deméter -contestó Pirítoo.
-¿En serio? ¡Pero si Perséfone ya está casada con el rey Hades, dios de la muerte!
-Lo sé, pero ella odia a Hades y quiere tener hijos. Y no puede tenerlos con el dios de la muerte.
-Parece una aventura bastante arriesgada -consideró Teseo, poniéndose pálido.
-¿No eres el rey más valiente que existe?
-Lo soy.
-¡Entonces, vamos!

Cogieron sus espadas y, por la puerta lateral, descendieron hasta el Tártaro. Allí, le dieron al can Cerbero tres pasteles con jugo de amapola para adormilarlo. Luego, Pirítoo golpeó con los nudillos la puerta del palacio de Hades y entraron.
Hades preguntó sorprendido:
-¿Quiénes sois, mortales, y qué queréis?
-Yo soy Teseo, el rey más valiente que existe. Éste es mi amigo Pirítoo, que cree que la reina Perséfone es demasiado buena para ti. Y quiere casarse con ella -le dijo Teseo.

Hades sonrió. Nadie lo había visto sonreír jamás.

Robert Graves

3 de enero de 2014

Tengo 26


Por derecho tengo el lado bueno de tu espalda
suelo estar desafinado entre la gente
viajo más de lo que debo, debería beber menos
por favor aún no te vistas, no te vayas
Por amor dejé a mi hermano con mi hermana
por la infancia sé lo que es felicidad
Una noche vi una luna que miraba

y bailamos en secreto sobre el mar

Tengo 26, soy feliz así, tengo tres amigos, dos hermanos, nada suelto
No sé qué decir, nunca creí en dios
soy fruto de un cuento que escribió mi padre, mi madre lo cantó

Por los libros que sostuve me mantengo

llevo con la voz un acento de sal
he llorado con un beso no robado
por remar junto a mi padre soy verdad
En esta vida vi salir del agua a mil delfines
rezar a dioses que no existen pero matan a gente
Fui con la guitarra hasta Madrid
eché de menos a mis padres
eché de más algunos bares...

viví feliz

Mis canciones han viajado más que yo, han besado más que yo, sonarán cuando yo no
Nunca me ha faltado nada, el amor fue mi casa y mi colchón, una playa enamorada
He aprendido a perder, he visto la luna en Montmartre
he visto a una niña que es madre, he visto a un hombre que es mujer
Me alejé sin querer, me he visto muerto en un lavabo
por la corriente arrastrado sin saberlo, me alejé
He visto como al llover casi a diario nace un verde

sobre el asfalto he visto gente que ha caído por volar
He oído cantar a mi madre cuando aún yo no podía

Tengo 26, soy feliz así, tengo tres amigos, dos hermanos, nada suelto
No sé qué decir, nunca creí en dios
soy fruto de un cuento que escribió mi padre, mi madre lo cantó


Tengo 26 años y a vivir...


Andrés Suárez

1 de enero de 2014

El aguador de Sevilla


Diego Velázquez

El escondite

El verano era para mí jugar al escondite
hasta las doce en la plaza del pueblo,
aunque ya no haya pueblo, ni plaza,
ni doce que se me resistan, y el escondite sea
tan sólo una ilusión que, a veces, me asalta.
Imagino, ahora que el verano como lo soñé está escrito,
que el tiempo busca el recuerdo para medirse.
Debo suponer entonces que he vivido,
que fui yo y no otra
la que se enamoró del reloj aquellas noches,
la que ahora puede meter la mano en el pasado
y arrancar una de aquellas rosas -borrosas ahora-
con las que el recuerdo me consuela.
Soy yo,
la que nunca pensó que podría escribir
sobre “el paso del tiempo”:
-¡Buá, estos poetas…! –decía.
Yo,
la que se salvó:
-¡por mí y por todos mis compañeros!

Rocío Saavedra

En el backstage


La estrella principal
rodó por la escalera
entre disparos de flash
en un reflejo fugaz
de los ochenta.

La entrada triunfal
y a la salida te llevan
a la parte de atrás
como las chicas
del servicio de limpieza.

Cuando te ven llorar
lágrimas al borde de tu boca
para disimular
lágrimas a punta de pistola.

En el backstage...

hasta quedarte a solas.

¿A qué velocidad escapa
lo que damos por perdido,
lo que creíamos caído del cielo?

La estrella principal
ahuyenta los destinos compartidos
y está dispuesta a planear a ras del suelo
para justificar
lágrimas al borde de tu boca,
para disimular
lágrimas a punta de pistola.


Quique González