2 de mayo de 2014

La buhardilla

Parece que han vuelto
las luces a la buhardilla,
aquella donde los ratones
conversan con mis miedos,
ajenos al felino que los espera
bajo la escalera, junto a un cuenco
de leche, y un canario, y una libertad
enjaulada que se resiste a serlo
en una casa en ruinas por tu ausencia;
y mientras los ratoncitos ríen en su idioma,
a salvo de las cadenas, de las garras,
y de las tristes sombras
de sus fantasmas.